viernes, 28 de noviembre de 2008

Culos redondos y perfectos se estremecen ante el intelecto de un prosaico acondicionado: tiene estacas en el pelo. Ay, Julián, qué lindo estás. A mi no me servía el virtuosismo del diálogo, la facilidad para la palabra; la simpatía de las chicas (ingresos prohibidos) que sólo desvelan algunos libros, algún alcohol. ¿Te gusta? es nueva. Las rosas no entienden lluvias (y sin embargo ¡ay! cómo se dejan...) Hablaba de desvelo, decía, y creyó que se refería a la tragedia del insomne; tampoco entienden sobre descorazonadas de medianoche, mediodía, mediocielo. Nada es impedimento a la hora de derrochar silencios (y siguen) Julián, Julián, Julián. ¿Te acordarás...? Me refería a algún objeto inanimado, a algún efecto inmaterial. (Que a partir de que se siente, también así resulta). El miedo se esconde entre las ruinas de aquella ronda, ellas se agachan para evitar chocar y ¡ay! piensa Julián ¡cómo se dejan! Un espectáculo grotesco; una pobreza de argumento; una bomba en el pecho detonando traumas irreversibles para el prontuario del pobre tipo, la pobre mina, la que siempre sonríe, el que nunca llora. A mi no me servía ni siquiera la especulación. A mi no me servía. Te lo juro por la mediocridad de tus encuentros, Julián. Yo te espero, ya sabés. Estoy acá, sonriendo y fumando, Julián. Vos ya lo sabés. Aunque un borrador divino inunde tu alma y se lleve tu cuerpo, aunque un corso de perros recelen tu ego y se hamaquen en aquel dolor, manipulando todo olvido.
Vos ya sabés que yo te espero, y más.
La paradoja de lo simple:
lo que me hicieron y lo que hice.


Tal vez crea que no. Se enfrentaron con un facón inglés de delicados grabados cuando volvieron a su casa; al fuego perpetuo de la inconformidad (y ese consecuente y siempre tácito ´SIN EMBARGO´) Yo te lloro y pataleo y me retuerzo y te escupo de nuevo; tergiversar el recuerdo y darle un fin complaciente ¡YO PAGUÉ POR ESTO! (y que se lea e interprete COMO SE DEBE) tan así. Así: en todo sentido. Y ahora duele, siempre duele. Nenes ardiendo en juegos ingenuos cortan brazos ajenos con el filo de la ingenuidad: te quiero mucho, te quiero tanto, nunca me dejes, tuyo siempre. Talleres de noviazgos reciclados en un calendario; las agendas de aquellos grandes peces se desvanecen en itinerarios (pero a nadie duele) ¿Y cuando decís nadie, decime, a quien te referís? Tal vez, decía (él), crea que es cierto. Que no importa tanto. Que no nos concierne, que en realidad ´pensandolo bien´ no importa en absoluto. (Usted, el de camisa roja, oiga. ¿Es consciente del color que lleva puesto? Usted ostenta comunismo ¡atrevido! ¡asqueroso! ¡váyase ahora mismo! Ahora, es esta cosa ¿no cierto? Usted, el de negro ¿me sigue? esta cosa de que al sentenciar que se piensa bien entonces también se piensa mal; la acción de pensar, el pensamiento mismo. ¿Maldad? ¿Bondad? ¿Correcto e Incorrect0? (y entonces te señalo -y a tantos recuerdo- y pienso: QUE SÍ, QUE COMO NO. Que nada es intelecto, que todo se corrompe, que el pensamiento no es sincero. Ocurre que el silencio retrotraeme, oiga, y las voces se levantan como olas impenetrables sobre piedras débiles (y viejas, y débiles, sobre todo). Ya sé, ya sé. Usted, el de campera amarilla, no tiene que volver a gritarlo. Lo oímos todos ¿de qué se ríe? ¿tengo algo en la cara? ¿rasgos de su madre, tal vez? ORDEN EN LA SALA. UN POCO DE RESPETO, SEÑORES; QUE ESTO NO ES ORIENTE MEDIO, EH.

Che, Francisco ¿te acordás de Paola?
¿Paola?
Paola, la de tu barrio. La morocha...
Paola...
Sí.
Mirá de lo que me haces acordar, chabón.

¿Por qué saltaste con eso? ¿Por qué te acordaste?
La nueva.
¿Qué tiene? ¿Se llama Paola?
No. Me hace acordar, nada más. La cara, no sé.

Yo no sé si podría vivir en esta ciudad durante mucho tiempo más. Hay vestigios de colores marcando puntos de mi vida en cada rincón por el que camino, en cada calle que cruzo, en cada semáforo en el que espero, en cada auto, marcados en las huellas de las baldosas, en los rostros, en todos los relojes de todos los cafés; en cada mesa, cada beso; es la intolerancia a la que se reducen cada una de esas frustraciones, recuerdo a José Luis y mis deseos de cuidarlo, mis miedos, después, por lo que podría pasarle, las culpas (siempre plurales) de permitirme esa despedida, de estar de acuerdo y sin más llevarla a cabo. Sabiendo.

sábado, 22 de noviembre de 2008

La idea era que de lejos, a cierta distancia, unos metros, unas cuadras, lo necesario como para distinguirla como tal, bah, todas las orugas son mariposas.

Pero es mediocre, trillado, infantil, estúpido, falto de gracia, carente de ese no se qué que qué se yo, fácil, impoluto, fonéticamente triste, incluso. Una oda al sedentarismo del imaginario; estancado e inútil, enfermo y curado.

NO. Bueno, sí. Todo se resumiría a que te vayas a la concha de tu madre.
Abro la página. Leo las ofertas: descarga premium, descarga normal. Releo el encabezado, el link, estudio las fotografías, las posibles sugerencias que tal vez me estoy perdiendo.
Pero no.
Nada más resulta pornográfico (ni opcional).
Acaso esté en la dirección equivocada.

Cumbia, nena.

Criticaba a la luna mirando hacia el piso: mirá vos, la gran puta. Yo me manejo así, decía. O creí haber escuchado. NENA, ¿SENTISTES ESE RUIDO? y por dentro quería momificarla, sentir su vos bronceada y cruda y áspera restándome para siempre con sus juicios ridículos. Era mi familia, insatisfecha (ella, yo, qué mas da). Habra una constante limándo toda esperanza. Lijando toda esperanza. Pudriendo toda fé, saboreando cada lágrima. O quizás no. O eso creí haber creído. Cambia los sentidos de todo lo que toca, y su tragedia es el poder de la elección: oscurecer, oscurecer sólo. La mano que me acaricia es la misma que me azota, y después se desentiende, lo olvida, lo repregunta: ¿NENA, SENTISTES ESE RUIDO?
Solían seducirla imágenes aberrantes proliferándose desde su cabeza hasta sus acciones, desencadenando un circuito de tragedias tangibles e inacabables, perpetuas, mías. El llanto habitual se refugiaba en el baño, donde las literatas fantasmales guardaban silencio y los instrumentistas impartían sólo miradas maternales. Era esa calidez la que buscaba, la que obligaba a desenterrar dolores, materializarlos, humillarlos con aquellas mismas ganas. Nadie lo sabe. O eso esperaba creer. La expresión se mimetiza con el ambiente cuando abro la puerta para salir, y por esa misma razón me cubro. Tal vez esa sea la causa por la que la gente, a veces, decide no morir.
Te extraño tanto.

Aquí había un "post"

pero dadas las (tristes y aún ebrias) circunstancias, hemos editado el texto, limitandolo a una sola frase de la que la literatura contemporánea no debiera estar jamás exenta:

se lo digo a un blog puto
y te odio y ojalá que te coja una super pija que te deje hemipléjico


Sin más, los honorables reconocimientos al mail que figura en pantalla.

lunes, 3 de noviembre de 2008

vivo sabiendo que la vida es más que esto
y sin embargo.
Dislexia Emocional
(risas)
aplauso.
¿para qué espero para esto espero para qué?
En la película se habla de trascender a la muerte. Una señora oligarca se viste de negro e inunda su discurso de ideales perversos perversamente refinados. La mujer, la señora, la vieja, levanta el pulgar y señala al cielo: ESA, ESA CHICA.

PARE.

sábado, 20 de septiembre de 2008

la verdad es que yo no esperaba que llegaras, primavera hija de mil putas

sábado, 13 de septiembre de 2008

¿En serio me decís? - Se corrió el flequillo de la cara por primera vez en toda la noche. Hacía seis horas que estabamos juntos. Siete, tal vez. Días, incluso. No podría recordar con precisión. Sé que hacía algo parecido a cantar mientras chupaba el cigarrillo e inclinaba hacia el piso su vaso de alcohol.

¿Qué haces? -pregunté- estás volcando todo.
¿Eh?
Que si te casás conmigo.

(Usted aún no lo sabe; se enterará dentro de unos minutos, tal vez, pero esa era la segunda vez que me atrevía a proponérselo)

¿Qué decís? - cuestionó, como siempre, tan perspicaz, con esa lucidez que lo caracteríza, que lo despierta en los momentos menos apropiados. Y yo, claro está, no dije nada; me dediqué a mirarlo. ¡Ah, callar! Esos silencios que nos eximen del inminente (tardío, a veces, pero siempre inminente) abandono.

-Nada. Que estás volcando todo.

-Ya sé. Aún analízo la opción de pedirte que lo lamas y relamas del piso en cuanto termine de caer la última gota. Y después necesitaría que me beses. Pero que me beses bien.

Volvió a chupar su cigarrillo y hubo un silencio todavía más grande. Tuve miedo de que no quisiera casarse conmigo si lo besaba, si respondía, si me quedaba callada, si me agachaba a lamer esos alcoholes del piso sucio, si después de eso corría, si lo hacía con sorpresiva naturalidad, si decidía taparme la cara, poner música, cambiar de tema, pedirle que parara, que no podía aguantar más. Que dolía. Que ya sabía que de cualquier manera me iba a dejar, que se aburriría, que sabía que me preguntaría que qué podría perder, que odiaba esa respuesta, que lo odiaba más a él, que qué hacía yo ahí, que quería irme, que me abriera la puerta, que no volviera a mirarme nunca más.

sábado, 30 de agosto de 2008

NOOOOOOOOO

No sabés lo que me pasó.

jueves, 28 de agosto de 2008

Vos sos vanguardia

Yo soy la taquicardia de una guardia de Moron.

de los viajes en el tiempo


viernes, 22 de agosto de 2008

hoy

Hacia el hondo bajo fondo donde el barro se subleva.

martes, 19 de agosto de 2008

mirá que lindo tango

Ha plateado la luna el Riachuelo
y hay un barco que vuelve del mar,
como un dulce pedazo de cielo
con un viejo puñado de sal.

Golondrina perdida en el viento,
por qué calle remota andará,
con un vaso de alcohol y de miedo
tras el vidrio empanado de un bar..

La cantina llora siempre que te evoca
cuando toca, piano, piano,
su acordeón el italiano…
La cantina,
que es un poco de la vida
donde estabas escondida
tras el hueco de mi mano.

De mi mano que te llama silenciosa,
mariposa que al volar,
me dejó sobre la boca, ¡sí!
su salado gusto a mar..

Se ha dormido entre jarcias la luna,
llora un tango su verso tristón,
y entre un poco de viento y espuma
llega el eco fatal de tu voz.

Tarantela del barco italiano
la cantina se ha puesto feliz,
pero siento que llora lejano
tu recuerdo vestido de gris

domingo, 17 de agosto de 2008

Droga;





Cuando era chico creía en el virtuosismo de las cosas posibles
ahora todo es distinto
ayer a la noche el sociólogo que estaba al lado mio en la cama dijo que las estadísticas le arruinan la vida a la media
y yo pensé
fascista

-mamá mamá,
papá tiene una porno
abajo de la cama.

-papá, papá
mamá tiene a un burgués
en el placard.

Como si no se pudiera después
hablar de política en la mesa
la misma cara de verguenza
que pone cuando te ve llegar

es esta.

¡Vamos, che!
dale, dale, dale, dale, dale, dale.
Dale que...

eramos chicos a los que no nos importaba
ni la causa ni el efecto
ni la consecuencia que arraiga esto que te cuento
QUe ES SECRETO
shhh...
así se dice cuando queres que alguien se entere
acto fallido, shhh
así se dice
los papis nos leen el inconsciente
dame nesquik
¡y a guardar, a guardar!
a cada individuo en su lugar
¡hagamos patria en la costa atlántica!
(¿Ehhhh?)

Cuidemos ahora a lo que antes
solíamos atacar
yo lo quemo

Y él pensó
fascista

Mamá mamá,
mamá tiene una fantasía sexual

Y se hablan PAVADAS
pavadas imperiales que sangran sobre el arroz de la abuela cuando comemos
se dice UTENCILLLLLIO, U TEN CI LIO, sin sh. Porque el sh es de POBRE (¿Ehhh?)
¿Y yo qué soy? ¿y yo qué soy?
¿y yo qué tengo? ¿por qué me falta? ¿qué te metes?
¿y esta a quien le habla?

papá, papá
papá nunca me quiere


ni nadie;
ni nunca.
-¡Mascarpone, la concha de su madre!
-¿...Me llamaba, señor?
-Ajá, ajá
-¿...Sí?
-Necesito un favor, Mascarpone.
-Digame.
-Agarre esos papeles y vayase URGENTE a la concha de su madre.
-Pero, señor...
-PERO PERO ¿PERO QUÉ, MASCARDI?
-Eso será imposible.
-¿Imp, imposible, dice?
-Sí.
-¿Por qué, carajo?
-Porque mi madre murió hace seis años.
-Ay ay ay, mascarpone, usted siempre el mismo inútil, eh. Cáaa arajo.

sábado, 16 de agosto de 2008

uia.
dolió un poquito.

dale dale dale nena que así no se hace
cuando aprenderás
hacete respetar
a mi nadie me grita.
a mi sí.
qué tanto grito.
bajá el tonito
otra cara no tengo
a quien le compraste esos ojos
hola mami
viejo pajero hijo de puta
la concha de tu madre
nena, nena, nena; dale.
apurate
llegamos tarde
monedas no tengo
hoy no traje
qué mal que te vestís
me duele la cabeza
siempre lo mismo
vos siempre igual
sonreís mucho
¿tan triste estás?
deberías hablar un poco más
contame un chiste
no es para tanto.
mi vida, mi vida, mi vida
hiciste bien
hiciste el mal
hiciste mal
así no
así no se hace
cuando seas grande
vas a ver
te vas a dar cuenta.
será hoy pienso tendrá razón pienso
¿...EH? ¿TODAVÍA ESTÁS ACÁ?
hoy el de seguridad, que es guitarrista y ya no presta discos originales de steve vai, dijo haciendo referencia a su uniforme "así trajeado me siento un sindicalista"

miércoles, 13 de agosto de 2008

Auspicia este "posteo"...

Vaca yendo,
gente,
al baile.


...Fernet Branca.

martes, 12 de agosto de 2008

mE PIDE DE NUEVO que DESPILFARRE palabras por doquier, ulizando a las MISMAS de forma inconsciente o tal vez debiera decir consciente pero despreocupada o quizás ETCÉTERA. La realidad es que complacer se dificulta con tanta música de fondo; recuerdo una discusión con mi madre en la que se planteaba a partir de qué se medía el talento de un músico y recuerdo también sus fundamentos ridículos (Charly García) (LO QUe escucho en este momento, a lo que me refiero es) se reduce a SUBJETIVO, SUBJETIVO, PREJUICIO, y entonces ABRAZAME ASÍ;; POR DIOS, ABRAZAME FUERTE. También podría decirte que una nena que tu madre trajo o que por qué mejor no salimos a caminar: el sol está maravillosamente insoportable. Me quemo ¡Me quemo! aceite hirviendo sobre la piel débil y una vieja que me pide SOCORRO. ¿Socorriste a alguien alguna vez? Una chica se desmaya en el colectivo, y alguien se preocupa porque no pierda sus anteojos de sol, porque nadie los robe. Yo me río. Ahora, digo. HOY NO. batería; sigo esperando, esperando, esperando. mE pregunto qué pasará el día en que SÍ, SÍ. PARÁ. TENGO QUE APAGAR LA MÚSICA ¿Igual valdría que siguiera, verdad? lo que pregunto es CHE, ¿PERO ME SEGUÍS LEYENDO, NO?
Como dije, me remitiría también a LOSIGUIENTE:

sin miedo sentis, tes / la soledad
A un amigo diciendome "la canción es buena, pero escuchá esa S" a ese mismo amigo riendo, después. La canción no era la que cité, igual (y a mi no me parecía buena en absoluto) PORQUE, ¿TE ACORDÁS, MÁ? SUBJETIVO Y VERBORRAGIAS. Hemorroidales verborragias; televisión amarillista sonoriza mi habitación y personajes entrañables reaparecen pintando mis paredes, ensuciándolas, tachando cada mancha con su discurso moralista (acaso sufran delirios dignos de proxenetistas huérfanos ¿querrán que los abrace?) ¿vos querés que te abrace? No, tal cual. No, ya sé, ya sabía. ERA UN CHISTE, por ejemplo. nUNca me gustó el papel de la victimización, bajo ninguna circunstancia, en ninguna vida. Nada justifica la cobardía de la negación y como que estoy esperando que pase algo inesperado y no. Sabés -te decía- me pregunto como será el cambio. La gente habla de voluntades y sacrificios. La gente es pelotuda. Odio a la gente. Cabeceras de frases. Y la única idea es odiar a la gente. Te odio. T E, O D I O. niMIEdades del medioevo se filtran por los pensamientos generacionales y todo desemboca en una sociedad enferma QUE ATESORO. ¿Y sabes por qué? porque todo el mundo sabe, todo el mundo quiere olvidar. No; en serio. Los quiero a todos. aBRAZARÍA a cada uno si pudiera. Camarera, camarera, otro fernet por favor ¿vió que linda está la noche, camarera? está casi tan linda como lo estuvo el sol de hoy.
He salido a caminar
He visto a la luna brillar radiante sobre el charco de una vereda céntrica
He escuchado un tango mientras contemplaba aquella imágen in nol vi da ble
y mirá, mirá, mirá que luna hermosa
tan escandalosa y
me vino a buscar.
¿y amar, decís?
porque yo lo que escuché fue otro ferné. Me pregunta si digo en serio lo que digo, creo que está poniendo en duda todas las verdades que oculta cada palabra que transmito. Acaso no me esté esforzando. Acaso su inconformismo ilimitado haya cancelado su memoria de forma crónica, te repito: despreocupado. La base de tu pedido, me refiero a lo qué. ¿LO QUÉ, QUÉ DIJISTES? AHORA NO ME VENGÁS CON QUE NO TE CABE LO QUE ESCRIBO. Basta, me cansaste.
CHau, no te olvides de que te odio.
Sí, sí. Conmigo no, eh. Te agradezco.

domingo, 3 de agosto de 2008

capaz que para vos no significa nada


NENE NO ME TOQUÉS LOS MARCADORES NO ME TOQUÉS. ESOS SON DE JUGUETITO, ¿VES? NO SIRRRRRVEN ¿VES? A VER, DECÍLE A ELLA "DALE GUACHINA" PARÁAAA, QUÉ VA A REPETIR SI YA SE OLVIDÓ, ¿O NO?

ÁE GUAYINA
ÁE ÁE GUAYINA


NO TE RÍAS QUE POR ESO LO REPITE, IDEOTA.

GUAGUAGAUGAUGAYIIIIIIIIIIIIIIINA

SOS UN ERROR DEL INTELECTO DE DIOS. SACALE LOS MARCADORES, LA PUTA QUE TE PARIÓ. ÉPA. NO HABLEN EN FRENTE DE NIÑO ASÍ.

lunes, 21 de julio de 2008

Escribime una carta, dale, no seas hija de puta. Es el rigor con el que vestís a tu confianza ¡quién te va a creer! Semejantes ojos sólo podían dar miradas miserables ¡bombas de hipocresía! Calcos de un corazón se retuercen y quiebran dentro de cinco líneas ilegibles: si no te escribo es para que me sigas creyendo. Ahora borrá lo último y decile que la querés.
Dale, decíselo.
Dale, no seas hijo de puta. NO; MENTIRA. Ya sé, no te obligaría, jamás podría (MENTIRA) de manera inconsciente, al menos: ya sabrás que nada es improvisado con vos. Analizar todo es la manera implícita de cortejarte. TODO, y nada es mentira. La gravedad se desdobla e ideas horribles seducen sus leyes. Una nena lujuriosa con delirios de inocente te invita a dormir al lado suyo, a velar sus intenciones, que son tuyas.
No te voy a volver a ver.
¿Oís?
Me pregunto en qué parte de la historia podría aplicarse un poco de lógica. Y vos le pedís racionalidad a lo que me pasa; que no se escribe, que apenas puedo trasladar -con su mediocridad intacta- a una hoja. No quisiera hacer de esto un reproche simplista. No quisiera hacer de esto un reproche, quiero decir. Mi único miedo es que no lo comprendas (¡ella, aún se lo niega!) Lo que pasa es que yo te quería, nada más. La seducción no le significaba nada, el amor es el que engaña. ¿Será así? tampoco quería hacer un juicio sobre algo, esa nimiedad que le era ajena, porque él leía, y leía y nada más. Después se encontró con ese deseo de brillo enceguecedor. Se despertó al lado mío, reaccionó, bajó el libro.
"Yo no"

No quiero más



te prometo que mañana dejo de fumar
dejo de cantar
de maquinar como al acecho todo el tiempo
de tomarme las cosas tan en serio
a veces no puedo, te digo y me contás
que a vos te pasaba lo mismo
pero que ahora conseguiste trabajo
y tenes un hijo
-¿y?
te digo y me regalás el cielo ; un gran silencio
-y que ahora no tengo tiempo
ni para pensar

y yo te quiero dar un abrazo
y mandarte a cagar
a la vez
con la destreza virtuosa
la jodedera moral
la crueldad acunada en la inocencia
de esa gente que mira el reloj
cuando te pregunta como estás.














se me hace tarde


te quiero acá


morite


yo más.
mentira mentira mentira mentira
a donde fuiste a donde fuiste
mentira mentira mentira mentira
a donde fuiste a dónde fuiste. . .
aprieto los dientes
y un calor de mentes
aprieto los dientes
y miro a occidente
y donde estas vos
y dónde estas vos. . .
hay dias y dias y dias y dias
y donde estas vos.
hay minas y minas y minas y minas
y dónde estas vos